Evocan Cuestiones Sobre las Demoras y Falta de Uniformidad en Una Carta a la Secretaria de Labor
Urgen a la Secretaria que Organice Juntas Regionales con Grupos Interesados de Agricultura para Mejorar el Programa
U.S. Senador de Colorado Michael Bennet, junto con un grupo bipartidista de sus colegas en el Senado, expresó hoy su preocupación con la forma en que el programa de Visa H-2A—cual es fundamental en proporcionar labor para los productores agrícolas en Colorado y en todo el país—se está administrando. En una carta dirigida por Bennet a la Secretaria de Labor Hilda Solís, los senadores preguntaron, en nombre de los productores, sobre los retrasos administrativos resultando en escasez de labor, y sobre una falta de uniformidad en la aplicación de las regulaciones H-2A. Los Senadores enfatizaron que aunque un programa de H-2A administrado eficazmente no disminuye la necesidad de reforma migratoria mas completa, ofrecería una ayuda a los productores que luchan contra la escasez de labor.
“Este programa ha sido una línea de salvación critica para los productores que no pueden encontrar labor local para trabajos que pueden ser riguroso e intensivo”, escribieron los senadores en la carta. “Desafortunadamente, hemos escuchado las preocupaciones de los productores y otros que están familiarizados con el programa H-2A y de los problemas con la forma en que se administra.”
El programa H-2A está autorizada bajo la Ley de Inmigración y Nacionalidad de 1952 y fue creado para ayudar llenar escaseces de labor relacionadas con labor de agricultura al permitir la admisión de trabajadores extranjeros temporalmente. En la carta, los senadores señalaron que el Departamento de Labor redujo su tasa de cumplimiento para tomar decisiones oportunas de 95 por ciento en 2006 y 2007 a 57 por ciento en 2011 y 2012. Además, desde el año 2008, las apelaciones de aplicaciones H-2A negadas han crecido por un 800 por ciento.
La carta urge a la Secretaría de Labor que trabaje con el Departamento de Seguridad Nacional y el Departamento del Estado, que también manejan el programa H-2A, para organizar juntas regionales con los productores para mejorar la comunicación e identificar maneras de mejorar la administración del H-2A.
La carta es parte de esfuerzos por parte de Bennet para abordar las preocupaciones sobre el trabajo y la inmigración en la comunidad agrícola. Durante una audiencia del Comité de Agricultura del Senado el mes pasado, manifestó su preocupación al Secretario de Agricultura Tom Vilsack acerca de cómo el sistema de inmigración está poniendo en peligro las granjas y ranchos en Colorado y a través de todo el país.
Junto con Bennet, los Senadores que firmaron la carta fueron Sherrod Brown (D-OH), Michael B. Enzi (R-WY), Mike Crapo (R-ID), Bill Nelson (D-FL) y James E. Risch (R- ID.).
El texto completo de la carta siguiente:
Estimada Señora Secretaria:
Le escribimos para expresar nuestras preocupaciones con la administración del sistema de visas H-2A y sus graves implicaciones para los productores y el suministro de alimentos de nuestro país.
El éxito de la agricultura Americana es un testimonio a la ingenuidad, compromiso y trabajo de nuestros agricultores y ganaderos. Las prácticas agrícolas de Estados Unidos han evolucionado, con innovaciones tecnológicas que maximizan la producción y hacen mejor uso de recursos limitados. En 2010, las granjas y ranchos de los Estados Unidos produjeron 369 mil millones de dólares en bienes y la industria de alimentos y fibras apoyaron 21 millones de empleos en los Estados Unidos. La agricultura América tiene el mayor excedente comercial de cualquier sector empresarial en el país con un excedente de $ 30.5 mil millones. Para el pueblo Americano, esto significa tener acceso a comida de alta calidad, a precios razonables. Americanos gastan aproximadamente el 9.5% de su ingreso disponible en comida, que es el porcentaje más bajo en el mundo.
Como usted sabe, el programa actual de H-2A está autorizada bajo la Ley de Inmigración y Nacionalidad de 1952 (8 USC § 1101) y fue creado para ayudar a cubrir la escaseces de labor relacionadas con la agricultura, al permitir la admisión de trabajadores extranjeros temporales o estacionalmente . Este programa ha sido una línea de salvación critica a los productores que no pueden encontrar mano de obra local para trabajos de duración corta que pueden ser riguroso e intensivo.
Desafortunadamente, hemos escuchado las preocupaciones de los productores y otros que están familiarizados con el programa H-2A sobre los problemas con la forma en que se administra. Los productores critican cada vez más la forma en que la solicitudes de visas se tramitan y ultimadamente se expeditan. Han destacado casos numerosos en que las demoras administrativas innecesarias han resultado en no tener suficiente labor para realizar el trabajo necesario en varios intervalos durante la temporada, disminuyendo la producción y resultando en pérdidas considerables. Estos reclamos se apoyan en datos del Departamento de Labor (en lo sucesivo, “DOL”) relacionados con su desempeño en el cumplimiento de los plazos legales para el procesamiento de las solicitudes H-2A. En el año fiscal 2006 y 2007, el Departamento de Labor fijó el objetivo del 95% para la expedición de decisiones oportunas sobre estas aplicaciones, la tasa de cumplimiento real de esos años fueron del 57% y 56% respectivamente. DOL desde entonces ha bajado sustancialmente sus objetivos, estableciendo una tasa de objetivo de cumplimiento de solo 57% en 2011 y 2012.
También estamos preocupados por lo que parece ser una falta de uniformidad en la aplicación de varios reglamentos relacionados con el programa H-2A. Los usuarios de H-2A rutinariamente traen a nuestra atención casos en donde las aplicaciones son demoradas o negadas debido a discrepancias mínimas relacionadas con el idioma o de los funcionarios aplicando un rigor irrazonable que resulta en apelaciones costosas para los contribuyentes de impuestos. Desde 2008, las apelaciones de aplicaciones H-2A negadas han crecido en un 800%. Este aumento sustancial manifiesta mas las frustraciones de los productores con el programa.
Está claro que estos temas han afectado la relación entre los productores y las tres agencias federales que administran el programa H-2A. Mientras creemos que el objetivo principal de estas agencias debe ser proteger a los trabajadores Americanos, garantizar la seguridad de nuestras comunidades y manejar responsablemente el proceso de visas que cumple con las necesidades de las empresas; también creemos que esto puede hacerse sin sacrificar la confianza y la buena voluntad de los agricultores y ganaderos Americanos.
Aplaudimos algunas de las medidas que el Departamento de Labor ha adoptado para mejorar el acceso al programa, tales como cómo hacer seminarios sobre las aplicaciones de visa H-2A. Sin embargo, creemos que estos esfuerzos deben ser ampliados a través de una mayor comunicación con la intención de mejorar y simplificar la administración del programa y promover mejores relaciones con los productores. A medida que el programa H-2A se administra por las tres agencias federales independientes, urgimos a DOL que trabaje con el Departamento de Seguridad Nacional y el Departamento de Estado para establecer juntas regionales sobre el programa H-2A con productores a través de todo el país. Estas reuniones ofrecerán una oportunidad para que las agencias puedan abordar las preocupaciones relacionadas con la administración de H-2A y identificar soluciones donde sean posible.
Mientras estas medidas no resolverán algunos de los temas laborales más fundamentales que enfrenta la agricultura, ni minimizaran la necesidad de una reforma más amplia, es muy importante que ofrezcamos alivio a los productores donde sea posible.